El líder liberal del sur de Australia, Vincent Tarzia, renunció después de sólo un año en el poder, diciendo que la decisión era sólo suya y que se tomó por razones familiares.
“Fue un día desafiante”, admitió durante una conferencia de prensa el viernes. “La política es uno de esos juegos en los que entras con un escudo o encima”.
Tarzia enfatizó que no fue expulsado.
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“Ningún compañero me presionó, ningún compañero me dijo que dimitiera, nadie me dijo que dimitiera. Ésta es mi decisión. No estoy nada amargado, estoy tranquilo”, afirmó.
Este hombre de 39 años, que tiene un bebé de 5 meses y otro de 4 años, dijo que su joven familia fue el centro de su elección.
Deseó “lo mejor” al próximo líder liberal y prometió su pleno apoyo. “Hay mucho talento en este partido. En última instancia, tenemos que realizar una campaña juntos y yo apoyaré esa campaña”.
Cuando se le preguntó sobre su futuro, Tarzia dijo sin rodeos: “No necesito una oferta de trabajo”.
Ha representado a Hartley desde 2014 y fue reelegido para un tercer mandato en 2022. En 2018, como presidente, se convirtió en la primera persona en Australia en permitir que el turno de preguntas se transmitiera en vivo en Facebook, una medida que, según dijo, tenía que ver con “apertura y responsabilidad”.
Tarzia asumió el cargo en 2024 después de que David Spires renunciara, ganando la votación del liderazgo por 18 votos contra cuatro.
Durante gran parte de su mandato, la popularidad del Partido Liberal ha disminuido, a pesar de su promesa de “mantener al equipo unido” antes de las elecciones de marzo de 2026.
No hay una fecha específica para que el Partido Liberal se siente y vote sobre un nuevo líder.
